Continuando con un año lleno de novedades en su segmento de turismo, Mil Suelos abrió su restaurante de bodega en Chachingo, Mendoza.
La cocina, a cargo de Álvaro Muñoz, se basa en una fusión de fuegos, productos locales de Mendoza y tesoros frescos de su huerta. Al igual que los vinos de Mil Suelos, cada plato celebra la diversidad de la provincia, resaltando la riqueza y autenticidad de los ingredientes que brinda la tierra.
En ese concepto, los fuegos aparecen para resaltar los sabores naturales, los aromas, las texturas y la calidad de los ingredientes, desde carnes asadas y pesca de río, hasta vegetales ahumados.
Por otro lado, la huerta proporciona ingredientes frescos y vibrantes de temporada. De esta manera, con un compromiso con la sostenibilidad y la calidad, cada plato refuerza la conexión directa entre la tierra y la mesa brindando una experiencia gastronómica auténtica y saludable.
Acompañando la experiencia gastronómica, Mil Suelos diseñó flights de cuatro copas basados en distintas narrativas, desde la conexión con sus raíces que reflejan los vinos de Manos Negras, pasando por la expresión de viñas centenarias en Teho hasta la búsqueda apasionada en Buscado Vivo o Muerto.
Por supuesto, la carta del restaurante también ofrece la posibilidad de pedir por botella los vinos más representativos de Mil Suelos.
Las reservas para el restaurante pueden efectuarse online haciendo click aquí, mientras que aquí se puede acceder al menú completo.
Paralelamente, el visitante que busque ir más allá en la exploración de los vinos de Mil Suelos tiene la posibilidad de reservar degustaciones guiadas de la mano de Lucas Olguín, sommelier y encargado de Turismo de la bodega, las cuales incluyen también un recorrido por nuestras instalaciones.
Las degustaciones disponibles son tres y apuntan a poner el foco en distintos ángulos del portfolio. Así, la experiencia Raíces presenta un recorrido por su manera de expresarse en diferentes varietales, estilos, aromas y sabores, a través de una selección de las líneas Zaha, Estancia Los Cardones o Flora y Floralia.
En la experiencia Suelos, mientras tanto, se explora cómo los suelos forman parte de la identidad de las vides en una experiencia llena de texturas. La degustación se centra en los pinot noir Red Soil y Cold Soil de Manos Negras, los malbec de la línea Las Fincas, una exclusiva selección de Buscado Vivo o Muerto, o tintos de Teho.
Finalmente, la experiencia Terruños apunta a vinos que proponen un viaje sensorial, visitan terruños heterogéneos, delimitan parcelas, ascienden a las alturas, y seducen con expresiones únicas de regiones y viñedos. Los vinos protagonistas son Teho Grand Cru, Estancia Uspallata, Buscado Vivo o Muerto El Cerro y La Verdad o sus vinos del Norte argentino: Almacén de la Quebrada y Cielo Arriba.
Las experiencias se ofrecen en castellano y en inglés, y pueden reservarse online haciendo click aquí.
Además, quienes visiten Mil Suelos también podrán acceder al wine shop para adquirir sus etiquetas favoritas y seguir disfrutando en casa.